Dado el calor que nos invade, recordé que tenía unas huevas de merluza en el congelador y decidí que era la comida que más nos podía apetecer. Resulta un plato ligero, fresquito y fácil de hacer. No requiere estar entre fogones más que para cocer las huevas y los huevos y, además, lo puedes dejar hecho por la noche aprovechando que hace más fresco que al mediodía.
Es una receta que hago con cierta frecuencia cuando llega el buen tiempo. Compro las huevas de merluza frescas en la pescadería y, si son más de las que voy a utilizar, las congelo en film transparente individualmente, sin separarlas cuando vienen dos unidas.
Sirven como segundo plato o como tapa para compartir.
Esta vez hice pocas porque sólo éramos dos. Las completé poniendo de primero un Salmorejo.
No doy cantidades exactas, pues depende de cuántas huevas preparemos.
Ingredientes:
- Huevas de merluza.
- Sal gorda.
- Laurel.
- Pimiento rojo.
- Pimiento verde.
- Cebolleta o cebolla dulce.
- 2 huevos cocidos.
- Perejil fresco picado.
- AOVE.
- Vinagre de vino blanco.
- Sal.
Preparación:
Lo primero es cocer las huevas en agua con sal y 1 ó 2 hojas de laurel. El agua deberá hervir con un hervor suave para que no se les estalle la piel. El tiempo dependerá del tamaño de las huevas y si son frescas o están congeladas. Hay quien añade un chorrito de vinagre en el agua de la cocción.
Si son frescas, unos 15 minutos de cocción. Las que hice esta vez, como eran congeladas, las tuve 20 minutos y quedaron perfectas. Una vez apagado el fuego, dejarlas enfriar dentro del agua de cocción.
Una vez cocidas y frías, les quitaremos la piel y, con un cuchillo afilado, las partiremos en rodajas de 1 cm. aproximadamente, procurando que no se nos rompan. Las iremos colocando en la fuente donde vayamos a servir.
Cortar la cebolla, el pimiento rojo y el pimiento verde en brunoise. Echad todos ellos en un bol adecuado a la cantidad que vayamos a partir.
Pelar y picar menudos los dos huevos cocidos y añadirlos a las verduras picadas. Picar también el perejil y añadir al bol.
En un bote de cristal o similar, echar 2/3 de AOVE y 1/3 de vinagre, añadir un poquito de sal. Cerrar el bote y agitar para que la vinagreta emulsione. Echar esta vinagreta sobre las verduras y mezclar bien.
Repartir la vinagreta con las verduras por encima de las huevas. Tapar con film transparente y meter en la nevera.
Cuando vayamos a servir, sacar unos 15 minutos antes la fuente con las huevas de la nevera para que se atempere.