Más que Tarta de la Patrulla Canina debería denominarla Tarta Amor de Abuela 🙂 porque hay que querer mucho a una nieta para hacer «ésto» 🙂
Hacía años que no elaboraba tanta repostería como en estos 2 meses de verano. Y, por supuesto, jamás había hecho una tarta infantil como ésta.
Lo primero que hice fue comprar en Amazon la oblea comestible con el dibujo de la Patrulla Canina. Y ahí me empezaron las complicaciones porque, por lo visto, la decoración no se puede pegar sobre nata montada ya que la oblea se humedece y se ondula y se le va el dibujo. Así que tuve que buscar por internet cuál sería el mejor método sobre el cuál colocar la dichosa oblea.
Tras investigar el tema vi que la mejor forma era hacer una buttercream. Problema, yo nunca he hecho una buttercream. Pero bueno, pensé, si doy con la receta malo será que no sea capaz de hacerla.
Por lo visto hay una buttercream sencilla, a base de azúcar y mantequilla, y otra, algo más complicada y de más trabajo, hecha con una base de merengue suizo. Como decían que ésta última era más deliciosa y delicada me decidí por ella. No es difícil de hacer y la verdad es que está muy rica y sedosa.
Siempre pensé en rellenarla de nata montada, pero Elena quería de chocolate. Así que hice una mousse de chocolate y solucionada la petición de mi nieta.
Por lo demás, la tarta es sencilla.
Ah!, a la niña no le gustó demasiado (poco o nada) la dichosa oblea y por la tarde me dijo si podía quitarla. Así que oblea fuera y cubrí lo que quedaba de tarta con la mousse de chocolate que me había sobrado.
Todo tiene solución en esta vida.
La sorpresa de Elena al ver la tarta compensó todo el esfuerzo y cariño que puse en ella.
Pero, por favor, no quiero saber más de la Patrulla Canina en muuuucho tiempo. Acabé hasta el moño de los dichosos dibujos animados este verano.
Ingredientes:
- Un Bizcocho genovés
- Mousse de chocolate
- Buttercream de merengue suizo
- 1 Brick pequeño (200 ml.) de nata para montar de más de 35% de materia grasa.
- 50 ml. de agua y 50 grs. de azúcar para el almibar.
- 1 Oblea comestible para la decoración.
También necesitaréis la amasadora para montar la nata, hacer la buttercream y para hacer la mousse de chocolate. Asi como mangas pasteleras y boquillas para la decoración.
Preparación:
Uno o dos días antes hacer el bizcocho genovés. Ya os dejé como hacerlo en el enlace en los ingredientes.
Guardar el bizcocho en la nevera hasta el día siguiente, cuando vayáis a montar la tarta.
Hacer la mousse de chocolate, siguiendo las instrucciones del enlace. Reservar en el frigorífico.
Hacer la buttercream de merengue suizo. También tenéis el enlace de cómo hacerla en el apartado de los Ingredientes.
Hacer un almíbar hirviendo durante 5 minutos los 50 grs de azúcar y los 50 ml de agua.
Montaje de la tarta:
Cortar el bizcocho con ayuda de una lira o de un cuchillo.
Mojar con la cantidad de almíbar que os guste a la primera capa del bizcocho.
Para rellenar la tarta yo le hago un cordón alrededor de la superficie de la primera capa del bizcocho con nata o con buttercream, para que la mousse no se salga hacia fuera por los laterales y manche la decoración posterior. Si la decoración lateral la vais a hacer con buttercream, el cordón también. Si la hacéis con nata, entonces el cordón con nata. Para ello, meter la nata en una manga pastelera sin boquilla y perfilar todo alrededor.
Ahora rellenar el centro del mismo modo con la mousse de chocolate.
Poner encima la otra mitad del bizcocho y añadirle un poco de almíbar. Presionar ligeramente para compactar la tarta.
Cubrir con la buttercream y alisar.
Meter la nata o la buttercream en la manga pastelera y con boquilla rizada decorar los laterales de la tarta.
Guardar en el frigorífico al menos durante unas horas. Yo lo hice por la noche para el día siguiente de postre en la comida.
Unas 2 ó 3 horas antes de que vayáis a presentar la tarta, sacar de la nevera y pegar la decoración.
Sacar también el resto de la buttercream para que se ponga a temperatura ambiente. A mí se me olvidó este paso y por eso la decoración rosa no quedó perfecta.
Teñir la buttercream con colorante alimentario.
Rellenar una manga pastelera con boquilla rizada pequeña con la buttercream rosa y decorar alrededor de la oblea, de forma que quede como pisándola un poco para que no se levante la oblea.
Después de todo y para ser la primera (y última) vez que la hago, tampoco quedó tan fea 🙂 🙂